El plan pergeñado por Torcuato (Vicuña), Trauman (Mirás) y Alicia (Funes) queda inconcluso. Varios de sus enemigos salen indemnes del ataque a la casa-refugio. Ante el avance de la policía, no les quedará otra opción más que escapar, mascullando su mala suerte por una resistencia que no esperaban.

Mientras tanto, Bruno (Baró), Moretti (Heredia), Raquel (Suárez) y la banda se disponen a enterrar a sus muertos: Alí (Pérez de María), Alambre (Bengoechea), Dina (Torn) y Ruth. El catalán lamenta no haberse dado cuenta a tiempo de la trampa. Pero además, siente que hubo un traidor entre sus filas e intentará averiguar de quién se trata.

Gabriel (Salles) está a punto de afrontar el juicio que puede condenarlo a una larga sentencia en prisión. Lucía (Chaves) y el propio Bruno se harán presentes en el tribunal, esperando que -de una vez por todas- se haga justicia.