Cerca del debut de La Academia, Agustín “Cachete Sierra” reflexionó sobre “el gran desafío de aceptar el mundo del reality, del Cantando, del Bailando era poder lidiar sobre todo con este tipo de exposición personal. Anteriormente ya había aceptado ser parte de Sex, donde ya habíamos empezado a dar entrevistas de cuestiones personales, sexuales e íntimas para poder atraer también al público, por eso no fue que de la nada salieron esas preguntas o esas notas, de los abdominales, del sex symbol, etc.”.
“Ahora trato de alejarme un poco de esa imagen y ser un poco más genuino a la pantalla, pero es difícil”, admitió en nota con La Once Diez/Radio de la Ciudad.. Expresó entonces que “pero siempre estoy con los pies en la tierra, no me creo lo que vendo, estoy cerca de mi familia, de mis amigos, de mis compañeros”.
En este orden confesó porqué aceptó participar de La Academia. “Lo único que me limitaba tanto en el Cantando como en el Bailando era que no me animaba por vergüenza. Pero cuando me di cuenta que era solo eso, me anime, aprendí a cantar y no me perdí la oportunidad”, expresó.
Al tiempo que valoró que “el Cantando me trajo la popularidad, trabajo, el cariño de la gente, la exposición y ahora después de ver cómo salió todo y cuando nos dijeron que nos querían para lo que se venía después del Cantando, me llamó mucho más la atención y me dieron ganas de dar mucho más de mi, y es un proyecto más macro, canto, actuación, acrobacia”.
Para cerrar precisó que “la idea es que esto no sea solo en el baile, sino que abarque más talento. El equipo ya está armado, no arrancamos a ensayar, pero yo sí ya empecé por mi cuenta, porque quiero estar ya preparado para estar bien físicamente, para adelantarme a lo que se viene”. “Vamos a tener a Mati Napp de coach”, finalizó.