Este fin de semana, en “Implacables”, Susana Roccasalvo se metió en la interna de los programas culinarios y, tomó como punto de partida, los cambios que sufrió “Qué Mañana”, tras el fallecimiento del chef Guillermo Calabrese.

“En la nueva televisión, que se adapta, a veces los tiempos son muy cortos y se levantan programas que no le dan ni tiempo a que respiren -comenzó diciendo Roccasalvo-. Pero, a veces, cosas de la vida como ha pasado en este canal, donde perdimos a nuestro querido Guillermo Calabrese, todo se modifica y las autoridades de los canales se ven en un brete donde un programa que ya está instalado, con una modalidad, y a veces hay que rearmar la estructura”.

“Esto lo digo porque, a veces, la gente opina -aseveró Susana- y a mí me gusta que, cuando me llegan comentarios, aportarles algo. La esencia del programa no se pierde porque es un programa de cocina, los de la mañana, pero sucede que no todos los cocineros están aptos para conducir. Se van estudiando cómo se maneja y, de pronto, considera el canal que hace falta un conductor para que acompañe al cocinero y se sienta más relajado. Y ahora, un colega de muchos años, como es Mariano Peluffo, se va a sumar a ‘Qué Mañana’”.